La tarea de corregir y restaurar las cuencas vertientes al río Guadalentín ha sido, y sigue siendo, una de las más importantes y largas llevadas a cabo por la Administración Forestal. Diques, albarradas, umbrales de fondo e importantes repoblaciones son el testimonio de un trabajo continuado desde finales del siglo XIX.

Lejos quedan ya las primeras intervenciones de restauración hidrológico-forestal en la cuenca del río Guadalentín por parte de la Administración Forestal, allá por los últimos lustros del siglo XIX. Las actuaciones restauradoras realizadas desde entonces en las cabeceras de la cuenca, en las que se ejecutó la construcción de hidrotecnias y la repoblación de laderas, dieron como resultado una eficaz laminación de las avenidas catastróficas y la consecución de un conjunto de montes restaurados y de innegable valor ambiental.