Arroyo Cantalar, en la Sierra de Villafuerte
Arroyo Cantalar, en la Sierra de Villafuerte
Murcia enclave ambiental

    El río Segura hace su entrada en la Región de Murcia por la zona del noroeste, donde recoge las aguas de cinco grandes arroyos: Chopillo, Alhárabe, Benamor, Argos y Quípar. Hay que destacar que debido a la gran fisuración del terreno y a su naturaleza permeable, las sierras del noroeste murciano son auténticas esponjas que dan lugar a gran número de fuentes a lo largo de todo el territorio. Destacan las Fuentes del Marqués, en Caravaca; las de Moratalla, como el manantial del Cantalar, con  propiedades medicinales; Somogil, fuente termal con propiedades curativas; la fuente salina del Salero del Zacatín y la del río Quipar o de la Ramona en Calasparra. También las fuentes de Santanares en Cehegín y las de Gilico en Calasparra, de propiedades medicinales, aportan sus aguas al Segura.

    Esta zona, comúnmente conocida como Comarca del Noroeste, representa la Vega Alta del Segura, donde se han formado numerosos embalses e importantes ramblas, como la  Rambla del Moro y la del Judío. La acción del agua y su discurrir ha dado lugar a parajes de incalculable valor y belleza en esta zona, como La Puerta del Alhárabe, el tajo del Quípar o el Cañón de los Almadenes, que son todo un regalo para los sentidos e invitan a la aventura. La naturaleza que arropa esta zona es quizás la más rica y hermosa de la Región. Las aguas son limpias y salvajes y existen numerosos indicios biológicos de la calidad de los ecosistemas de la zona, como la presencia de la nutria (Lutra lutra). Este paraje se cubre de verde con la presencia de pinares, sauces, chopos, encinares y sabinares, creando unos espectaculares contrastes en las distintas estaciones del año.

    En estas aguas es frecuente la presencia de la trucha y el barbo. También el cangrejo de río, el martín pescador y algunas rapaces, como el águila real, el águila culebrera y el azor, habitan en esta zona. La riqueza es tal que se han designado en la Comarca del Noroeste diez zonas como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y cuatro Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA). Pese a ello, muchas especies se encuentran en peligro de extinción. El Alhárabe nace en la Sierra del Zacatín, junto al núcleo de El Sabinar, en el extenso municipio de Moratalla, a unos 1.150 m de altitud. En su recorrido hacia el embalse de la Risca, desciende hasta los 1.080 m, nutriéndose del aporte de cuarenta kilómetros de arroyos menores, distintos barrancos, ramblas y regatos. Algunos de ellos son el arroyo de los Cantos, el arroyo de Zaén por el margen izquierdo, y el arroyo de Perona y el barranco Mellina por la derecha.

    El Benamor nace en el campo de Béjar, junto a Los Álamos. Es afluente del Alhárabe y su ribera configura un paisaje propio.

    El Quípar nace en las sierras de Caravaca, descendiendo hasta su unión al Segura, en el Embalse de Alfonso XIII. Este ecosistema acuático alberga grandes cantidades de anátidas y fochas, y constituye una de las áreas mayoritarias de invernada del cormorán grande (Phalacrocorax carbo).

    El Argos nace cerca del Quípar, también en las sierras de Caravaca, arrojando sus aguas al Segura poco antes de la confluencia del Quíipar. Las formaciones vegetales asociadas a estos cauces son bosques de ribera con orlas de zarzal, cañaveral y tarayal, restos de alamedas y saucedas y la presencia de fresnos (Fraxinus angustifolia) y olmos (Ulmus minor), especies protegidas y escasísimas en la Región de Murcia. En las zonas más bajas encontramos pino carrasco (Pinus halepensis) y a medida que aumenta la altitud domina el pino rodeno (Pinus pinaster), mientras que en las cumbres más altas lo hace el pino laricio (Pinus nigra). Las encinas (Quercus ilex) también son abundantes y en ocasiones llegan a formar bosques mixtos junto a los pinos de singular belleza.

    Destacan también las comunidades de yesos representadas por especies como Teucrium libanitis, Thymus antoninae, Gypsophila struthium, Ononis tridentata y Helianthemum squamatum. Entre la fauna de la zona hay numerosas especies de interés comunitario, como la nutria (Lutra lutra), el galápago leproso (Mauremys leprosa), la boga de río (Chondrostoma polylepis), el caballito del diablo (Coenagrion mercuriale) y numerosos quirópteros, como el murciélago  de cueva y el murciélago mediterráneo de herradura (Miniopterus schreibersii y Rhinolophus euryale).

    En el suroeste de la Región (Tierras Altas de Lorca) se encuentra otra zona de arroyos donde nace el Luchena, un arroyo que vierte sus aguas al río Guadalentín, afluente del Segura que se une a él tras su paso por la ciudad de Murcia, ya cerca de la  desembocadura.

    Las aguas recogidas en los calares y arroyos de las sierras del Gigante, del Almires, del Madroño y de la Torrecilla van a parar al Guadalentín y al Embalse de Puentes, donde nace el río. Pese a la aridez del entorno, la vida es manifiesta: tortugas moras, jabalíes, el halcón peregrino, el águila culebrera, el barbo gitano, los juncos, espadañas y cañaverales que verdean el cauce, la garza real, etc. Una zona de singular belleza y de gran contraste con las especies del noroeste.