Preparación del terreno para la extinción
Preparación del terreno para la extinción
Murcia enclave ambiental

El inicio del fuego: la importancia de la detección

La importancia de detectar un indicio de un posible incendio en sus primeros minutos es fundamental para una extinción eficaz, rápida y segura y a su vez ésta desencadena una serie de actuaciones que finalizan con la propia extinción.

Y esta tarea de detección posee una importancia muy bien reflejada en el Plan Infomur 2006. Para ello tiene especial consideración el periodo estacional del año, que condiciona los efectivos para la protección y prevención contra incendios según el nivel de riesgo, a los que hay que sumar los agentes forestales de presencia permanente en nuestra comunidad.

Todos los medios de detección y extinción, apoyados por la central de operaciones forestales ubicada en El Valle, pasan por un punto referencial, neurálgico, receptor y coordinador: el Centro de Coordinación Operativa (CECOP), ubicado en el Centro de Coordinación de Emergencias de la Región de Murcia (CECARM).

Los recursos humanos destinados a las labores de detección de incendios, previstos y enmarcados en el Plan Infomur 2006, ascienden a un total de 126 personas, y se organizan en cuatro grupos:

1. Recursos habituales asociados a la Dirección General del Medio Natural.

2. 20 puestos fijos de vigilancia y detección, donde técnicos del terreno formados para la detección del incendio vigilan de forma ininterrumpida, como refuerzo a los de la Dirección General.

3. La Dirección General de Protección Civil amplía su dispositivo con 37 puestos móviles de vigilancia y detección que son coordinados con los agentes forestales de cada comarca.

4. Un avión de vigilancia aérea, con base en San Javier, capaz de transmitir imágenes fotográficas y de vídeo en tiempo real al CECOP, se incorpora a las tareas de detección.

Y a esto habría que añadirle el resto de las fuerzas de seguridad de todas las administraciones, municipal, regional y estatales, con especial relevancia del SEPRONA, y la no menos inestimable colaboración ciudadana con sus informaciones al Centro de Coordinación de Emergencias (112).

Extinción de incendios: cuando la llama se propaga

Si ya no hay más remedio que intervenir, los intereses que priman por encima de otros son los humanos, siendo de inestimable valor los recursos destinados a este último eslabón en la cadena de operativos que luchan contra el fuego. En esos momentos en los que el ser humano se enfrenta, cara a cara, contra el fuego como enemigo, todas las opciones posibles de extinción amparan a aquellos que trabajan para salvaguardar la naturaleza.

Para el año 2006, los medios que la Dirección General del Medio Natural pone a disposición del plan en su época de peligro alto, se concretan en 18 brigadas forestales de extinción (una más que en 2005) y además se ponen en marcha 4 unidades de intervención rápida compuestas por un vehículo ligero con capacidad de extinción y dos brigadas helitransportadas, con una inversión de cerca de un millón de euros para esta anualidad.

La Dirección General de Protección Civil amplía su dispositivo permanente, la brigada helitransportada de Alcantarilla, a la que hay que sumar las brigadas locales de auxilio rápido, incrementadas, durante esta época, con dos helicópteros de transporte y extinción, más la participación de los parques de bomberos de la Región.

En total, más de 300 personas están a diario de servicio, preparados para responder a la alarma por incendio forestal.

El Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Dirección General para la Biodiversidad, aporta en verano un helicóptero también desde La Alberquilla (Caravaca de la Cruz).