Sierra de Burete
Orquídea de la flor del hombre ahorcado (Aceras anthropophorum)
José Antonio López Espinosa

   Herbácea, perenne, con tallos verde amarillentos, de 20-25 cm de altura. Hojas 3-5 basales, de oblongas a lanceoladas, las superiores, caulinares, similares, pero más estrechas, hasta envolviendo a la inflorescencia, de tipo espiga, densa, aunque en ocasiones laxa, con flores espaciadas, pero agrupadas, sésiles (sin peciolo), de tépalos externos conniventes, verdes, a veces con reborde rojizo, y labelo corto, de 1-1,2 cm, verdoso-amarillento, o con frecuencia anaranjado, trífido, con lóbulos laterales lineares, y el central bífido, sin espolón; ovario de hasta 1 cm de longitud, retorcido. Fruto de tipo cápsula, con costillas, que contiene miles de semillas en su interior.    

Hábitat y distribución

   Crece en pastizales frescos, herbazales de montaña, matorrales y bosques abiertos, tanto pinares (Pinus halepensis, P. pinaster, etc.) como carrascales (Quercus rotundifolia), principalmente en suelos bien desarrollados y de naturaleza caliza. Especie mediterránea y centroeuropea, distribuida en el Mediterráneo occidental por el norte de África, Península Ibérica, Córcega, Cerdeña y Sicilia. En España es habitual del norte, centro y sur, haciéndose rara en el sureste y las dos mesetas. En la Región de Murcia se conoce sólo de cuatro localidades: Sierra de la Muela (Moratalla), Sierra de Carrascoy (Alhama de Murcia), Sierra de Burete (Cehegín) y Puerto del Garruchal (Murcia).

Observaciones

   Aunque de la flor del hombre ahorcado se ha indicado que, como la orquídea piramidal (Anacamptis pyramidalis), es una de las orquidáceas silvestres más frecuentes en los terrenos calizos de la Península Ibérica, se trata de una de las especies más raras de la familia en territorio murciano, motivo por el cual –meritoriamente– está incluida en la categoría “Vulnerable” del Catálogo Regional de Flora Silvestre Protegida de la Región de Murcia (Decreto 50/2003, BORM núm. 131).

    Hasta tal punto es una especie escasa en la Región de Murcia que, por ejemplo, de la primera referencia de Aceras anthropophorum, en la Sierra de la Muela, poco más se sabía que se observó un único ejemplar, recolectado en 1997 para un herbario de la Universidad de Murcia. No es hasta 2006 cuando se localiza un nuevo grupo, de reducidos efectivos, en la Sierra de Carrascoy, que –lamentablemente– fue hozado por jabalí, a excepción de dos ejemplares, los cuales se ha comprobado no llegan a florecer todos los años. Con posterioridad, en 2012, se encuentra la especie en la Sierra de Burete, donde pocos años después (2015) se detectan 30 nuevos individuos, en la que es la población principal conocida en la Región de esta orquídea, para la que –aún– posiblemente corresponda su consideración como "En peligro de extinción".

 

José Antonio López Espinosa