Noelia Arroyo se reúne con responsables del Ayuntamiento, la UPCT y el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales para diseñar los primeros pasos del Plan Director que podría estar listo antes de verano

Molino salinero [La vida en la costa]

La Comunidad, a través de la Consejería de Cultura y Portavocía, pondrá este año en marcha el Plan Director de Molinos de la Región de Murcia, destinado a recuperar y poner en valor los molinos que se encuentran en diferentes municipios y para el que Cultura ha incluido una partida inicial de 100.000 euros en los presupuestos de este año. El plan podría estar listo antes de verano y los primeros trabajos se iniciarían en el último trimestre de 2017.

La consejera de Cultura y portavoz del Gobierno regional, Noelia Arroyo, la directora general de Bienes Culturales, María Comas, y varios técnicos de la Consejería se reunieron con el concejal de Cultura de Cartagena, Ricardo Segado; el vicerrector de infraestructuras de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), Marcos Ros, y el delegado en Cartagena del Colegio de Ingenieros Industriales, Javier Blanco, entre otros.

Este encuentro marca el inicio de los trabajos conjuntos para elaborar el citado plan que “convertirá nuestros molinos en un referente nacional turístico, en dinamizadores de nuestra economía y en un nuevo ejemplo de la recuperación de nuestro patrimonio histórico para ponerlo a disposición de toda la sociedad”, según declaró Arroyo, quien aseguró que “para garantizar el éxito de la iniciativa es imprescindible que todos caminemos en la misma dirección, que creemos nuevas alianzas y nos impliquemos al máximo”.

En este sentido, la consejera y portavoz animó también “a las empresas que quieran contribuir al desarrollo de la Región a sumarse a este ambicioso proyecto; una colaboración publico privada con incentivos y que también estará incluida en el Plan de Impulso para la Cultura y el Deporte”. Del mismo modo, añadió, “que será imprescindible la colaboración de los particulares y ayuntamientos que son propietarios de los inmuebles”.

 

Más de 200 molinos

En la Región existen 221 molinos de viento en 14 municipios, y de ellos, 205 son propiedad de particulares y 16 de titularidad municipal. En la actualidad, los técnicos de Bienes Culturales de la Comunidad están completando el inventario, visitando y estudiando cada molino y recogiendo el estado en que se encuentran sus diferentes elementos: el cuerpo, la maquinaria, así como las norias, balsas o andenes. Los molinos de la Región están declarados Bien de Interés Cultural (BIC) desde 2007.

Todo este trabajo, por su envergadura, se ha desarrollado a lo largo de los tres últimos años y, además de estudiar cada molino, se está delimitando el entorno de protección, teniendo en cuenta la identificación del paisaje y su compatibilidad con los usos tradicionales.

El futuro Plan Director de Molinos marcará las directrices para su recuperación y puesta en valor y también establecerá un calendario de inversiones para los próximos años para continuar el proceso de recuperación, ya que “nuestros molinos son elementos patrimoniales, paisajísticos y turísticos de primer orden que tenemos la obligación de poner en valor”, tal y como aseguró la titular de Cultura.

Las reuniones con otras instituciones, colectivos y empresas continuarán durante las próximas semanas para dar a conocer los trabajos que se realizarán dentro de este plan y para recoger diferentes aportaciones y sugerencias.

Construcciones ya recuperadas

El pasado año, y a instancias del servicio de Patrimonio Histórico de la Consejería de Cultura y Portavocía, se comenzó ya a trabajar en la recuperación de estas emblemáticas construcciones con la ejecución de las obras de protección y conservación en el Molino de Quintín y en el de La Calcetera, en San Pedro del Pinatar.

“Este fue el inicio de un plan que ahora el Gobierno regional pretende extender poco a poco al resto de molinos de nuestra Región”, apuntó Arroyo, recordando a continuación que “de todos es conocida la imagen de los molinos holandeses, manchegos o los de las islas griegas, y a menudo nos olvidamos de que la mayor concentración de molinos de viento de vela está en el Mediterráneo, especialmente en el Campo de Cartagena, y lucharemos para situarlos en el lugar que merecen”.