Fray Martín Sarmiento, nació en Villafranca del Bierzo, León, en 1695 donde fue bautizado con el nombre de Pedro José García Balboa. Con cuatro meses se traslada con su familia a Pontevedra, ciudad donde vive hasta los quince años. En mayo de 1710 se desplaza a Madrid para ingresar en la Orden Benedictina y en 1714 se marcha a Salamanca a estudiar Teología. Es entonces cuando se cambia el nombre y se matricula en la Universidad como Fray Martín Sarmiento. Ya desde joven compartía los estudios teológicos con una amplia afición por la geografía, la cronología, la historia natural y las humanidades, en especial, los estudios lingüísticos.
Tras una breve estancia en Asturias regresa a Madrid, donde reside durante veinte años. La biblioteca del monasterio de San Martín de Madrid, donde pasa gran parte de su vida y donde muere en 1772, contribuye a su gran formación. El año 1751 es decisivo en la trayectoria científica de Fray Martín Sarmiento ya que es entonces cuando comienza a desarrollar su preocupación naturalista y botánica. El resultado final son sus "Pensamientos Crítico-Botánicos" (1753-1762). Después de la lingüística, su principal afición fue sin duda la historia natural, así lo demuestra el Real Jardín Botánico creado a instancias de Sarmiento. Su pasión por la botánica y la naturaleza le llevan a reclamar desde 1743 la creación de bibliotecas públicas y jardines botánicos en diversas ciudades al estilo de los que habían entonces en Europa.
La constitución de la Academia de Agricultura y de las dotaciones de cátedras universitarias de Historia Natural, Agricultura y Botánica fue otra de sus grandes reivindicaciones. Sus continuas visitas a Galicia influenciaron notablemente a obras como "Coloquio de 24 gallegos rústicos", donde narra algunos hechos con fidelidad histórica y propiedad filológica, sirviendo esta obra de base, además, para el comentario lingüístico de las voces recogidas en su tierra.
A partir de 1755 empieza a aplicar todos sus conocimientos sobre botánica y clasifica los materiales recogidos en Galicia. Fruto de estos años de trabajo serán los numerosos estudios sobre el tema que serán calificados como excelentes repertorios de materiales lingüísticos gallegos de una época en la que todavía era impensable la elaboración de un Diccionario Gallego. Fray Martín Sarmiento fue un hombre adelantado a su tiempo y que luchó por su tierra en todo momento.