Como consecuencia de la participación en el Proyecto GENMEDOC, la Dirección General del Medio Natural ha obtenido los siguientes logros:
Constitución de un equipo multidisciplinar capaz de trabajar en todas las facetas de la conservación ex situ de material genético vegetal.
Adquisición de una infraestructura científica básica para la constitución de lo que debe ser en breve el banco de germoplasma vegetal de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
La formación de jóvenes técnicos en conservación vegetal.
La recopilación y puesta en común de una valiosa información relativa a aspectos reproductivos, protocolos de germinación y conservación de las especies seleccionadas, información que debe constituir la base para la planificación y gestión de los hábitats de interés comunitario y otras zonas protegidas.
En la recta final del proyecto podemos afirmar que la Dirección General del Medio Natural y con ella la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, se ha incorporado de manera decidida a las administraciones que han llevado a cabo medidas activas para la protección de su patrimonio natural. Para tal fin han sentado unas bases que acabarán concretándose sin duda en un innovador centro de conservación de germoplasma. Además se integrarán en una red de intercambio de información, experiencias y formación de un elevado valor tanto técnico como científico.
SEMCLIMED, el segundo paso tras GENMEDOC
Continuando la línea de trabajo de GENMEDOC, SEMCLIMED amplía hasta 16 el número de centros que forman parte de esta red, lo que permitirá consolidar una red de observatorios permanentes del impacto del cambio climático sobre la biodiversidad de flora del Mediterráneo.
Se trata de un importante proyecto de actuación, que cuenta con un presupuesto que alcanzará los dos millones de euros y que permitirá avanzar en la salvaguarda de la rica biodiversidad de todo el ámbito territorial mediterráneo.
Este proyecto propone un conjunto de actuaciones dirigidas a evaluar los efectos del cambio climático sobre la biodiversidad de la flora mediterránea, así como actuaciones de conservación activa de las especies y hábitats más amenazados.
Otro de los objetivos que se persigue con este proyecto es el de incrementar la conciencia pública sobre los impactos sociales y ecológicos que se derivan del calentamiento del planeta.
Refuerzo de las poblaciones amenazadas
Entre las actuaciones previstas destacan los trabajos de restauración de hábitats degradados y refuerzo de las poblaciones amenazadas que tienen como objetivo el establecimiento de una metodología de trabajo común entre todas las administraciones participantes.
Igualmente se estudiarán las diferencias en la germinación de las semillas en distintas poblaciones situadas a lo largo de un gradiante climático y de los cambios en los procesos reproductivos de un conjunto de especies de plantas de distribución circummediterránea, así como la flora singular. Todo ello sirve para evaluar los efectos del cambio climático.
Además se incrementará la cooperación con centros del norte de África, una de las zonas más vulnerables y menos estudiadas de la cuenca, así como la acción sobre otras áreas sensibles como las islas mediterráneas.